23 de junio de 2015

Opinión: "La alegría de todos"

Martes, 23 de junio.

Antonio Morales*
Gran Canaria es hoy una isla más feliz. Las dificultades que atravesamos no se han marchado, siguen ahí, obligándonos a poner todo nuestro esfuerzo en el intento de dar un vuelco a la realidad social. Sin embargo, tenemos un motivo nuevo para sonreír, para sentir incluso esperanza de que las cosas pueden mejorar, para, todos a una, compartir una alegría cierta: nuestro equipo representativo, la U.D. Las Palmas, es de Primera División.
Desde que en 1949 naciera de la unión, recordémoslo siempre, de los cinco clubes fundadores, muchas vicisitudes han aparecido en el camino, pero nada ha impedido que hoy lata con vigor el sentimiento amarillo en los corazones de nuestra gente. Y este domingo, en un estadio entregado a su colores, cuerpo técnico y jugadores estuvieron a la altura para lograr cumplir el sueño de todos.
Porque todos y todas hemos transitado juntos, detrás de un escudo, hasta este éxito final. Hemos intentado transmitir a los futbolistas la enorme energía positiva que somos capaces de generar, apoyándolos en la consecución de una meta que compartimos tantos y tantos aficionados.
Resulta indudable la importancia del deporte en la cohesión social. Pocas cosas nos reúnen con tanta fuerza y de manera tan explícita, y el fútbol, como deporte rey, aún más. La Unión Deportiva representa el mejor ejemplo. Nuestro sentido de pertenencia se refuerza con ella tanto en el triunfo como en la derrota, nuestra autoestima como pueblo aumenta en cada gesta de las muchas que a lo largo de su dilatada historia nos he regalado el club de Pío XII.
Tengamos presentes también en estos días los aspectos alejados del deporte que, sin embargo, agradecemos del ascenso de Las Palmas. Estudios rigurosos señalan una  mejora inmediata de la economía local en las ciudades que consiguen plaza en la élite del fútbol español. Una buena cantidad de sectores, de grandes, medianos y pequeños empresarios, y sobre todo un gran número de trabajadores notarán a buen seguro que el equipillo ha subido a Primera. Por supuesto, nuestro principal motor económico, el turismo, tendrá un aliado de relieve en cuestiones de promoción exterior.
Los hombres y mujeres de nuestra tierra merecían una alegría de este calibre, y no de cabe duda de que el club, el cuerpo técnico y sus jugadores, con sensible mayoría de grancanarios, se sienten honrados de haberla protagonizado. Mi más sincera enhorabuena para ellos y, por supuesto, para los numerosos aficionados, de dentro y de fuera de la isla. La U.D. Las Palmas sigue siendo, ahora en Primera División, orgullo del pueblo canario.
*Antonio Morales es Presidente del Cabildo de Gran Canaria.